jueves, agosto 12, 2010

Quito Patrimonio Universal de la Humanidad

La otra noche salimos a hacer una sesión fotográfica con un gran amigo que es fotógrafo, para llegar al departamento de nuestro gran amigo y modelo dimos algunas vueltas por el centro de Quito. Y como siempre, puede ver cosas nuevas y enamorarme cada día más de esta mágica ciudad. Son las luces, la noche, la niebla, las casas, la gente, la sal quiteña, el sol, el Pichincha, las tejas, los canelazos, los colibríes… es la mezcla, la amalgama, el poder tener todas las estaciones en un solo día.

En menos de un mes se celebrarán los 32 años de que Quito fue declarada la primera ciudad del mundo Patrimonio cultural de la humanidad por la UNESCO, y bueno, es cosa de entender el por qué. He escuchado a muchas personas hablar sobre este tema en las últimas semanas y la verdad es que he escuchado mil y un cosas, y claro lo importante es tener claro el concepto de patrimonio, y no hablo del haber familiar, hablo del legado para las futuras generaciones. Todas esas cosas tangibles e intangibles que se pasan de una generación a otra, y que es nuestro deber recuperar, cuidar y mantener. He escuchado la súplica paternalista en la cual se le pide al gobierno que solucione los problemas de la cuidad, gente que no puede ver más allá de su metro cuadrado, comentarios inmediatistas que no ven a futuro ni se sienten responsables de mantener a esta bella ciudad para que en el futuro se la pueda disfrutar.

Llevo casi 23 años viviendo en Quito, y les puedo decir que esta ciudad lo tiene todo, he descubierto a mis 32 años que soy Quiteño y que estoy orgulloso de serlo, me encanta caminar por sus calles, escuchar los dichos, el acento, los chistes, la sal, Quito es patrimonio por su geografía, su biodiversidad, su centro histórico, su proceso, rituales y tradiciones, mezcla de todos los rincones del Ecuador y del mundo. Salir a mirar el valle de Tumbaco desde el Balcón de Cumbayá, mirar Quito desde lo alto del Pichincha, son tantas cosas, y entender que Quito no es sólo urbano, Quito es también rural, y si bien no he visto un oso de anteojos en su estado natural, me he maravillado con los colibríes y su casi sobrenatural belleza y velocidad.

Esta es mi ciudad y soy parte de su historia, aquí hice la secundaria, la universidad, aprendí a manejar, me enamoré y me rompieron el corazón tantas veces, nos hemos acompañado en tantos amaneceres, es mi ciudad y nos hemos recorrido mutuamente. Buscando el sentimiento correcto sería amor, amo esta ciudad, uso sus palabras, la cuido y la descubro cada día más, su magia, su cielo estrellado. Y la verdad, me molesta cuando la veo descuidada, al salir un lunes y ver el parque lleno de basura, las angostas y pintorescas calles siendo utilizadas como baños públicos, el ver que las tradiciones y leyendas se pierden a los ojos de la juventud, si bien no nací en Quito, esta es mi ciudad, yo soy quiteño, me conozco los atajos y rincones de mi ciudad. Y soy co responsable de su mantenimiento y cuidado, lo único que pido es que las personas que hacemos y vivimos esta hermosa ciudad nos enamoremos de ella, la cuidemos y hagamos la diferencia, si nos juntamos todos, lo podemos lograr. Quito Patrimonio, te invito a conocerla y a descubrir su magia.


Mañana será otro día, tal vez mejor que hoy... Que me traerá el cambio de piel...

1 comentario:

María Augusta Iturralde dijo...

La ciudad es un espacio de vida, eso, un lugar donde cada minuto la haces tu cómplice, con cada paso la ciudad forma parte de nosotros mismos. Eres un quiteño, con acento guayaco y formación cuencana, un quiteño orgulloso de serlo, como quisieran ser muchos que nacieron en la maternidad de la 10 de agosto.
Que vayamos construyendo la ciudad desde la vida en ella, es la forma de conservarla y valorarla ahora y siempre.