viernes, octubre 05, 2012

la santa inquisición del tabaco...

Caminamos en el frio para llegar a la cafetería, esperando que una de las mesas de afuera esté desocupada… después de todo es nuestro último oasis de fumadores, el lugar está lleno de  señoras mayores y otros fumadores que nos miran con naturalidad al sacar la cajetilla y ponerla sobre la mesa.  Pedimos un par de americanos y conversamos de todo al ritmo de los cigarrillos como casi cada viernes o jueves.


Son tiempos difíciles para los fumadores, cada vez hay menos lugares en los que se puede fumar (en público), el tiempo pasa y las leyes se crean sin analizar las cosas a fondo, no soy un fanático del cigarrillo, de hecho sólo fumo a partir de las 6 de la tarde y no más de cinco, estoy consciente que me hace daño, al igual que estoy consciente que comer grasa al por mayor también hace daño, igual que beber en exceso, igual que los recipientes plásticos que son cancerígenos, y que mil cosas más que hoy en día es cancerígenos, nadie prohíbe las microondas de los teléfonos, ni el humo de los buses, ni el trabajar más de 8 horas… nada de eso está prohibido… nadie ha prohibido las hamburguesas gringas llenas de colesterol, preservantes y grasa que va directo a mis arterias y a las de todos…

Entonces el problema que veo es que los fumadores no tenemos una opción, un bar de fumadores como hay en otras partes del mundo, (Orlando FL, Adventure Island tiene un Ciggar Bar).  Es decir los que gustamos de comer sano tenemos opciones de pecar de vez en cuando y meter grasa en forma en hamburguesa en nuestro sistema, nadie les prohíbe a los gorditos que coman grasa… y eso que no es muy saludable que digamos tener sobrepeso, sin embargo hay tolerancia, y si no quiero ver como comen grasa al granel simplemente no voy y punto, no tengo que imponer a los que gustan de la grasa que no lo hagan, o a los que se dañan las rodillas con el ejercicio excesivo…

Un poco eso… todo en exceso es dañino… hay que mantener un equilibrio… nunca me he molestado si alguien me pide que apague mi cigarrillo (siempre y cuando sea con educación), de hecho suelo pedir permiso porque entiendo que otros no les gusta, pero la persecución absurda al fumador es grave, gente que habla mil cosas sin tener claro cuál es daño, cuales son los estudios y sobre todo cuales son los resultados… por ejemplo un hecho es que la marihuana es 20 veces más dañina que el tabaco, sin embargo me he topado con gente “verde” que la defiende y ataca al tabaco, el dato es no atacar a nadie, vivir la vida en paz, si quieres fuma lo que te guste, pero no jorobes más a los fumadores.  http://www.standard.co.uk/news/health/cannabis-one-joint-equivalent-to-smoking-20-cigarettes-7819756.html
Pero es el borreguismo en el que vivimos… lo dice alguien y el resto lo acepta como ley universal y como en los tiempos del oscurantismo creen que el que opine lo contrario trabaja para el diablo y que hay que quemarlo como a bruja… y así llegamos a los inquisidores del cigarrillo… dios se apiade de nuestros pulmones…


Mañana será otro día, tal vez mejor que hoy... Qué me traerá el cambio de piel...